Mi nombre es Rocío, las manos tejedoras detrás de Los Tejidos de la Peque.
Mi historia con el tejido es de toda mi vida. Abuelas, tías y madre tejedora.
Mis primeros tejidos fueron para mis muñecas, una de mis tías me regalo unas pequeñas agujas que se adaptaban a mis pequeñas manos.
De adolescente aprendí a tejer al crochet.
Descubrí un mundo nuevo con los Amigurumis, ¡me volaron la cabeza!
Lamentablemente sufrí un accidente hace unos años, con el tiempo empecé a sentir mucho dolor cada vez que tejía o realizaba algún trabajo. Al consultar con un especialista me dieron el peor de los diagnósticos… dejar de trabajar con mis manos… No les puedo explicar mi pena en ese momento.
Médicos, estudios, tratamientos… Mano inmovilizada… mucho dolor… dejar de hacer las cosas que me gustan fue muy difícil sin mencionar que trabajaba con mis manos.
Después de mucho tiempo me anime a tejer nuevamente, mi mano no está recuperada. Tengo días buenos y no tan buenos en cuanto al dolor. En el camino aprendí a tejer con la técnica del Macramé, el no manipular agujas y no ejercer tensión es un alivio. Si reconozco que tengo un limite pero el solo hecho de poder tejer es suficiente para mí.
Todo esto me sirvió para ser un poco más paciente, para seguir aprendiendo cosas nuevas, a ver un poquito más allá de los problemas y que siempre esta la persona que me sostiene.
A quien me leyó… GRACIAS 💜
Rocío